Día 1
Full day en el Maule
Partimos el día muy temprano desde la ciudad de Talca, por la Ruta Internacional Pehuenche hasta la Reserva Nacional Altos de Lircay. Este es un viaje de unos 90 minutos, pero que vale totalmente la pena realizar, ya que durante el camino nos encontraremos con grandes paisajes y pequeños locales donde los lugareños venden productos como pan y queso de campo, tortillas al rescoldo, helados de nieve, cerveza artesanal y mermeladas.
Un imperdible en el camino es parar en el pueblo de Vilches Alto, donde encontramos una variada oferta de servicios turísticos, y podemos abastecernos de ricas cosas para comer y beber antes de nuestra aventura.
¡Llegamos! Desde el acceso al área silvestre protegida hasta la administración de Conaf son 2 kilómetros, y desde acá comenzaremos nuestro trekking hasta el místico Enladrillado. Disfrutaremos de aire puro, adrenalina y la extraña morfolología de este lugar de 2,5 hectáreas.
El sendero que nos llevará a nuestro destino tiene una huella ancha y bien delimitada, que permite ir observando el espectacular cordón montañoso del Maule y el valle, donde es posible hacer avistamiento de cóndores planeando en las alturas.
Durante el ascenso encontraremos bellezas escénicas como la Laguna del Alto y el parador Tres Cuernos, desde donde puedes observar bosques de lengas y robles. Si vas en otoño, puedes practicar fotografía en el hermoso paisaje de tonalidades rojizos que regala el bosque maulino.
Es una larga jornada de caminata, por lo que debemos ir haciendo paradas en las zonas de descanso que tiene habilitadas la Reserva, como el puente de madera que cruza una pequeña quebrada, y tiene zona de camping. En este lugar nos hidratamos y recargamos energías con los productos que compramos en Vilches, para seguir adelante.
Alcanzamos nuestra meta: el Enladrillado. Desde acá tenemos una vista magnifica de los volcanes Descabezado Grande, Quizapú y Cerro Azul, así como del valle el Venado con el río Claro. Es el momento ideal para relajarse, conectarse con la naturaleza y darse un nuevo impulso para comenzar el descenso.
Si eres deportista, y tienes experiencia previa en esta excursión, puedes probar vivir esta aventura en mountainbike o en una cabalgata a caballo, siempre reservando previamente con un servicio turístico registrado en Sernatur. ¡Pura adrenalina!