La Parroquia San Pedro es testimonio del glorioso pasado del puerto de Pisagua durante la época de oro del salitre. Según registros, fue construida en 1866 y su arquitectura consiste en la estructura de una nave con ventanas de borde ojival en sus costados y frontis. En 1990, fue declarada Monumento Nacional, en la categoría de Monumento Histórico, al igual que su edificio paredaño ubicado al costado norte del Teatro Municipal, por su valor patrimonial y cultural.