Día 1
Historia de la cultura vinícola nacional.
Si eres amante de la cultura vitivinícola ¡este es tu día! Comenzamos el viaje desde la ciudad de Chillán para trasladarnos 50 kms hacia la localidad de Quillón.
Estando ya en Quillón podrás recorrer diferentes viñedos, algunos con una larga tradición de campo y, otras, que han innovado con un cultivo orgánico, logrando ensamblajes con uvas de Moscatel de Alejandría, País y Cinsault que son imperdibles. Pero eso no es todo, en la zona además está experimentando con la producción de wisky y espumante, que debes probar acompañado de productos locales.
Luego de este deleite para el paladar, busca relajarte en la Laguna Avendaño, donde podrás descansar en la orilla, dar paseos en lancha o practicar stand up paddle. Si vas con niños, ellos pueden chapotear en el agua o tomar clases de natación.
Por la tarde, puedes continuar visitando viñedos en la zona y te recomendamos ir directo a Portezuelo. El trayecto no dura más de 40 minutos desde Quillón, pero se pasa aún más rápido al disfrutar de los paisajes al cruzar el río Itata por el Puente Confluencia, puente con 521 metros de longitud, siendo el más largo del país.
En Portezuelo, podrás visitar viñedos con historia que data de finales del siglo XV, y apreciar como se almacena el licor en tradicionales barriles de roble chileno, que han dado origen al clásico pipeño, al casi olvidado “soleado” y al vino minsal o de mesa.