Millones de hectáreas de vegetación en el mundo son arrasadas por los incendios forestales, siendo una causa de deforestación y contaminación atmosférica, y Chile no está ajeno a esta realidad. En nuestros bosques y vegetación se originan todos los años un promedio de 6.000 incendios, afectando un área de hasta 50.000 hectáreas.
La causa de estos incendios principalmente son los humanos. Las actividades de las personas en áreas naturales tienen casi toda la responsabilidad de su origen y es por esto que somos nosotros como viajeros, turistas, amantes de la naturaleza y de todos sus paisajes, quienes debemos ayudar a prevenirlos.
Cuidemos los bosques de Chile
En Chile, sobre todo al sur del país, hay una cantidad impresionante de bosques que atraen a cientos de viajeros cada año con árboles milenarios, un verde frondoso y un aroma único. ¿Cómo no cuidarlos y amarlos? ¡Conozcamos algunos de ellos!
Futaleufú: Hogar del huemul, ciervos y cipreses que viven en la vegetación junto a uno de los mejores ríos, ideales para practicar kayak y rafting. Este hermoso destino que recibe a sus visitantes con frondosos bosques, es una parada obligada en la carretera austral.
Cochamó: “Donde se unen las aguas” eso significa el nombre de este encantador lugar, que sí o sí hay que aventurarse conocer. Acá te podrás encontrar con el Río Cochamó que cruza los valles rodeado de verdes y frondosos bosques. Podrás andar a caballo, visitar arte rupestre y practicar trekking.
Parque Nacional Queulat: Otro imperdible más de la Carretera Austral, que alberga uno de los bosques más hermosos de Chile. Está en la Región de Aysén y se caracteriza por su bosque “siempreverde” compuesto por coigues, tepas y grandes nalcas, especie popular en el sur de nuestro país.
Parque Nacional Conguillio: Este bosque milenario está a los pies de Los Andes, donde se encuentra el volcán Llaima a 3.125 metros de altura, acompañado siempre de las araucarias que complementan el hermoso paisaje.
Parque Nacional Huerquehue: Un espeso bosque de coigues y araucarias que esconde al lago verde, un hermoso lago de aguas esmeraldas y lago Toro. Un encantador escenario para acampar, observar especies, meditar y practicar deportes como el trekking.
¡Impactantes! Los bosques chilenos son increíbles y es imposible no querer fotografiarlos, contemplarlos y quedarse por siempre en estos parques y santuarios de la naturaleza. Los bosques milenarios tienen un valor patrimonial y natural tan grande que debemos tomarle el peso antes de visitarlos.
Así que, como ya sabes, hay que prepararse y conocer cuáles son los riesgos, no para nosotros, sino para ellos. Es por eso, que aquí te contamos todo lo que tienes que saber para realizar un turismo responsable a la hora de visitarlos y evitar un incendio forestal.
Empecemos del principio…
¿Qué es un incendio forestal?
El incendio forestal es aquel fuego que se propaga sin control en terrenos rurales a través de bosques, vegetación leñosa, arbustos y hierbas. En la propagación puede destruir hectáreas completas de naturaleza, ganado, viviendas y vidas humanas.
Existen dos formas en las que se pueden iniciar estos eventos. Una es de forma natural, donde erupciones volcánicas o tormentas eléctricas sin lluvia caen sobre algún prado. La segunda, y la gran causa, es el ser humano. Incendios originados por las personas producto de descuido y poco conocimiento sobre el tema.
Los efectos de un incendio no pasan solo por lo estético. Sí, se pierde un entorno natural precioso y zonas turísticas en muchos casos, pero ¿han pensado en los efectos que tienen para las personas y animales que habitan en el lugar?
Un incendio forestal puede causar contaminación en el agua, aire y suelo. El humo puede provocar accidentes, hay detención en procesos productivos, existen cambios en el viento, disminuye la humedad ambiental, se incrementa la temperatura, aumenta la radiación solar y se acelera el efecto invernadero.
Esto conlleva riesgos especialmente para la vida de los animales que allí habitan y una eventual migración.
¿Dónde y cuándo pueden ocurrir?
En nuestro país, los incendios forestales ocurren principalmente desde la región de Coquimbo hasta la región de Magallanes y pueden ocurrir en paisajes rurales y en torno a ciudades y pueblos, en la transición urbano-rural.
Estos indeseados eventos ocurren principalmente entre octubre y abril, entre primavera y verano, donde se reúnen condiciones ambientales favorables para la propagación del fuego.
Conozcamos las causas
La primera causa de incendio es el descuido de las personas. Se relaciona con el valor y el respeto que tenemos con las zonas naturales que visitamos. Si nuestra preocupación por el medio ambiente es nula, se producirán descuidos y negligencias en el comportamiento a la hora de hacer fogatas o botar un cigarro. Otra causa es la intencional, donde tampoco hay amor por la naturaleza y se piensa en este evento premeditadamente.
¿Cómo podemos prevenirlos?
¡Es aquí donde entramos nosotros! Los que adoramos la vegetación, el aroma de los árboles y el aire libre. Que no solo tomamos una foto de un paisaje, sino que lo apreciamos y damos gracias.
Como viajeros, hay distintas acciones que podemos tomar en cuanto a este tema. La más esencial es la educación. Donde nos podemos centrar en enseñar a nuestros pares, amigos y familia a tomar conciencia sobre el efecto y daño de un incendio forestal, el cariño y respeto que debemos tenerle a la naturaleza y nuestra tierra, que cada arbusto, árbol y la más pequeña plantita es, al igual que nosotros, un habitante más del planeta.
Cuando ya tenemos conciencia sobre el respeto a la naturaleza, las acciones más concretas que podemos realizar para prevenir un incendio forestal, cuando salimos de camping o paseo, son:
- Evitar fumar en lugares donde haya vegetación seca.
- Nunca arrojar las colillas de cigarros al suelo.
- Evita manipular fuentes de calor o fuego como velas o incienso.
- Evita encender fogatas. En caso de hacerlo, no la enciendas en zonas de vegetación. Hazla en un lugar despejado. Asegúrate que no haya ramas, árboles o elementos que se puedan encender con el fuego cerca de tu fogata. Ten cerca elementos que te ayuden a apagar el fuego como arena, tierra o agua.
Tomando estas medidas ya estarás contribuyendo al medio ambiente y evitarás un accidente. ¡Es muy fácil! Solo debes organizarte bien antes de realizar un camping o paseos, para que evites tener que prender fuego en lugares que no son aptos y contarle a todos tus amigos y familia sobre las medidas de seguridad y turismo responsable.