Ya se acerca la primavera y de la mano el 18, y la Ruta Termal del Destino Sietelagos en la Región de Los Ríos es un lugar preciso para dejar atrás el stress.
Sus centros habilitados, rodeados por atractivos naturales del alto nivel y servicios de calidad, están complementados con gastronomía, artesanía, actividades y deportes de aventura al aire libre, por lo que en esta zona las termas se han ido consolidando como un producto estrella.
Las termas son promovidas como lugares idóneos para quien quiere regalarse tiempo a sí mismo y al propio bienestar físico y espiritual. Recomiendan sus aguas como capaces de devolver la salud, el equilibrio y la armonía a quien confía en sus virtudes benéficas.
En esta ruta los establecimientos van desde los más rústicos a centros termales con diversidad de servicios, haciéndolos aptos para todos los públicos, y en los cuales se conjugan el bienestar personal y el disfrute de la naturaleza.
La agreste topografía del Destino Siete Lagos encierra infinidad de ambientes ideales para la aventura. Trekking, rafting, snowboard, observación de flora y fauna, canopy, kayak de río, travesía de lagos, cabalgatas y pesca con mosca, son algunas de las actividades posibles de practicar.
Sus diversos paisajes, ricos en fauna y flora, invitan a experimentar sensaciones inolvidables. Para practicar deportes, se hace permanente la tentación de explorar valles, lagos, ríos, montañas y volcanes.
Los empresarios indican que se asociaron porque se dieron cuenta que tienen muchas termas en un tramo de 50 km. La Ruta Termal se puede iniciar desde del pueblo de Coñaripe, ubicado en la ribera oriente del Lago Calafquén.
Desde Coñaripe es posible visitar las siguientes termas: (al nor oriente) Termas Vergara, Termas Geométricas y Termas El Rincón; (al sur oriente): Termas Ecopellaifa, Termas de Coñaripe, Termas Manquecura, Termas Liquiñe, Termas Punulaf, Termas Rayenco, Termas Trafipán, Termas Río Liquiñe, Termas Carranco y Termas Hipólito Muñoz.