Día 1

Deportes y aventura blanca

Este será sin dudas un fin de semana lleno de aventuras, y para disfrutarlo al máximo te recomendamos  partir muy temprano desde Santiago, tipo 07:00 de la mañana, para disfrutar las grandiosas montañas, el aire cordillerano y la sensación única de aventura. 

Al comenzar la subida a Valle Nevado, puedes hacer una primera parada para tomar una fotografía panorámica de la imponente Cordillera de Los Andes. Luego, sigue el curvilíneo camino hasta llegar al centro de montaña, donde podrás visitar sus instalaciones y disfrutar de la práctica de deportes como el ski, snowboard o lanzarte por las pistas para primerizos en trineo. 

Si lo tuyo es el trekking, también puedes hacer caminatas estilo outdoor por el encantador sector, pasear en las telesillas o saborear un chocolate caliente, en las zonas de descanso. ¡Una belleza! 

Posterior a ello, puedes dirigirte a Farellones. Acá podrás disfrutar del cálido ambiente de un pueblo mágico que tiene un poco más de 200 casas, pero que se caracteriza por su alta gastronomía y cosmopolitas visitantes, que llegan hasta él atraídos por las competencias y encuentros deportivos cada año. 

Día 2

Naturaleza y adrenalina

Segundo día de nuestro fin de semana de aventuras, y hoy debes conocer el impresionante Cajón de Maipo y el Embalse el Yeso, atractivos que están a un poco más de 58 kilómetros de la capital, pero a los que querrás volver una y otra vez.

Este paseo parte camino a San José de Maipo, una encantadora localidad donde el tiempo parece transcurrir más lento, al ritmo de la envolvente naturaleza que lo rodea. Recorre su Plaza de Armas, y abastécete de frutos secos, dátiles y una buena empanada de horno en los locales que están a su alrededor, date un gusto probando las preparaciones locales.

Ya preparados, sigue rumbo al Embalse de Yeso, un camino lleno de bellas postales naturales rodeados de altas montañas, casi siempre nevadas en invierno. Al llegar a destino, te sorprenderás con una laguna de aguas color turquesa, cascadas congeladas y un paisaje sobrecogedor. Este es el momento de capturar las mejores fotografías del lugar, mientras recorres con cuidado sus senderos y miradores. ¡Sentirás que puedes tocar las nubes en este destino!