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¿Eres fan de la comida chilena? ¡Nosotros también! Y porque hay Chile para la buena mesa, te dejamos este exquisito listado de preparaciones imperdibles de norte a sur.

Arica y Parinacota

Partiremos nuestro recorrido gastronómico en la primera región del país, Arica y Parinacota, donde sus platos están compuestos por productos del mar y de la tierra, con los cuales realizar deliciosas preparaciones.

Las populares almejas a la parmesana llevan limón, mantequilla, pimienta y tomate, además, están cubiertas con queso parmesano. La rica sopa calapurca se caracteriza por llevar una piedra caliente en medio del plato y se prepara con papas, mote, carne de alpaca, cordero, pollo, llama y rocoto, son preparaciones típicas de la Región de Arica y Parinacota.

Otro de los platos típicos de la comida chilena de la zona es el ajiaco, que es un caldo que se hace con cebolla, apio, pimentón, orégano, hierbabuena, carne cocida y huevos. Si bien este plato recibe el mismo nombre que el que se prepara en la zona central del país, sus ingredientes y preparación son diferentes.

Ojo, cada una de estas preparaciones llevan como broche de oro un toque de orégano de Socoroma, una hierba aromática que se cultiva a más de 3 mil metros de altura y regala un sabor inolvidable cada plato que sazona.  ¡Hay Chile para la buena mesa del norte!

Tarapacá

En la Región de Tarapacá se caracterizan por tener comidas con sabores intensos gracias a sus variados aliños y gran cantidad de pescados y mariscos.  Destacan platos como el caldillo de pescado, el pejerrey al dedo, los locos y el pulpo con mayo.

En esta región también encontraremos preparaciones con productos típicos del altiplano norteño, especialmente utilizados por las culturas aymará y atacameña producto de la herencia culinaria que nos dejaron.

Un plato típico de esta zona es la huatia o guatia conocida en aymará como waja. Esta preparación es una comida tradicional andina es parecida al curanto, ya que también se prepara en un hoyo. Pero a diferencia del curanto del sur, la guatia es tapada con hojas de alfalfa, tierra y piedras. Allí se cocina la carne de vacuno, cerdo, alpaca, pollo y cordero junto a papas, habas, camotes, choclos y verduras con piel.

Otro plato característico de la región es el picante de conejo, un plato tradicional de la comida chilena que lleva conejo, ajo, caldo de pollo, huevo duro y aliños, el cual es servido con arroz graneado o quínoa, que es un pseudo cereal que se utiliza como acompañamiento de guisos y carnes.

De postre puedes comerte un chumbeque, que es un dulce parecido al turrón, típico de la ciudad de Iquique el cual está hecho con una masa tipo galleta y con mermelada de frutos de la zona como el mango y la guayaba, además de miel y limón de pica.

Antofagasta

Luego de disfrutar de la deliciosa gastronomía de la Región de Tarapacá, seguimos en la zona norte del país para llegar a la Región de Antofagasta donde conoceremos el famoso perol. Este plato es una preparación con muchos productos del mar, tales como, locos, piures, ostiones, erizos, machas, choritos, almejas y colitas de camarón, las que son cocidas y servidas con jugo de limón, cebolla y perejil al lado de papas. Un plato tradicional de la cocina criolla chilena que no te puedes perder.

Si buscas un almuerzo un poco más liviano, puedes probar las empanadas de piure al horno o fritas o pedirlas con otros mariscos de la zona.

Otros platos que también puedes probar son el cóctel de erizos que lleva tomate, cilantro, cebolla, jugo de tomate, pisco o jerez y jugo de limón o el delicioso pulpo al pil pil que lleva de ajo, cebolla, mantequilla, vino blanco, carne de res y un poco de ají.

Atacama

La Región de Atacama es famosa por tener la producción de aceite de oliva más antigua de Chile. Esta tiene casi 500 años desde que los españoles introdujeron los primeros olivos al continente americano en el Valle de Huasco.

En esta región también podrás probar ricos platos de la cocina criolla chilena preparados con aceite de oliva y con variados productos del mar típicos de la zona norte del país. Uno de los platos que queremos destacar es la patasca, que es una famosa preparación en la cual se cocina un guiso picante que puede llevar carne charqui, de llama o de cerdo junto a papas y el maíz pelado.

Coquimbo

La gastronomía de la Región de Coquimbo, destaca por sus variadas preparaciones con productos del mar. Famosos son los ostiones de la zona. Otra razón para confirmar que  hay Chile para la buena mesa y amantes de los mariscos típicos de la zona.

En la zona hay innumerables peces, que puedes probar en la típica preparación que gusta a todos los chilenos: el pescado frito a lo pobre. Congrio, corvina y lenguado están en las opciones y es buena idea acompañarlos con salsa de mariscos y ensalada.

Alejándose de la costa, la región destaca por su producción de quesos de cabra. Un poco de aceite de oliva y quedará perfecto para cualquier aperitivo. De postre puedes pedir papayas al jugo, fruta típica de la zona o algún pastel con chirimoyas y papayas.

Valparaíso

La Región de Valparaíso destaca por sus variados platos en cocina criolla chilena, con exquisitos sabores de la tierra y el mar. Es famosa la chorrillana del puerto, que se prepara con carne de cerdo o de res, chorizo, huevos y papas fritas. Y por supuesto, el tradicional caldillo de mariscos que lleva almejas, camarones junto a otros mariscos cocidos con verduras y leche.

Otro producto clásico de la región y único en el mundo es la langosta de Juan Fernández, una delicia del archipiélago que es aplaudida a nivel mundial. Pero si tienes el placer de visitar la isla, te recomendamos probar la vidriola a la mantequilla, un sabroso pescado de roca que será una fiesta para tu paladar. Y si seguimos con las delicias de nuestras islas, y eres amante de los postres, entonces debes conocer el po’e, un queque dulce a base de plátano que engalana las celebraciones de Rapa Nui. ¡Ñami!

Metropolitana

Seguimos en nuestra ruta hasta llegar a la Región Metropolitana, donde podrás probar un rico tomaticán. Este guiso tiene su origen en los tiempos de la colonia, ya que mezcla los ingredientes traídos por los españoles en el siglo XVI con los de la gastronomía del pueblo mapuche. Se prepara con tomates, carne, cebolla, verduras y aliños.

Otro plato típico de la comida chilena que puedes probar en la zona central, es el famoso charquicán, preparado con charqui, que es carne secada previamente por varios días al sol. Esta carne es hervida y cocinada con zapallo amarillo, papas y verduras, formando un guiso rico y reponedor.

También puedes probar el costillar de cerdo en la zona de Pomaire junto a la popular empanada de kilo, que es una gran empanada que pesa 1kg y tiene una presa de pollo en su interior junto a cebolla, aceitunas y picante.

Y para finalizar con algo dulce, no puedes dejar de probar las Frutillas de San Pedro. Estas frutillas con denominación de origen, se dan en comuna de San Pedro a solamente 25 minutos de Pomaire y están entre las mejores del país.

O’Higgins

Ahora nos encontramos en la Región de O’Higgins, donde podrás probar ricos platos tradicionales de la cocina criolla chilena, como los porotos con riendas y las pantrucas que son unas masas cuadradas de harina que se cocinan en un caldo de verduras o de carne.

También en esta zona podrás probar el cordero del secano en cualquiera de sus variadas presentaciones, al palo, en medallones, con salsa de ciruelas, con puré de arvejas, con papas doradas o con ensaladas.

Otros platos de la zona son las papas con luche, un plato típico mapuche, que se hace con una variedad de alga originaria de la ciudad de Navidad. Y el pejerrey con quinoa, la cual es una semilla autóctona de la zona que reemplaza al arroz tradicional y que sirve como acompañamiento en este típico plato de la zona del Lago Rapel y de Paredones. ¡Hay Chile para la buena mesa del centro!

Maule

Seguimos recorriendo Chile hasta llegar a la Región del Maule. Aquí podrás probar exquisitos platos de comida chilena típicos de la zona como el pollo mariscal, la plateada, la lisa a la teja o una exquisita cazuela de chancho con chuchoca, todo esto acompañado de ricas churrascas o tortillas de rescoldo y un rico chancho en piedra que es una preparación para carnes y guisos, hecho con tomate, ajo, cebolla y ají molidos en una piedra.

Y de postre puedes degustar unas exquisitas papayas con crema producidas en la costa de la región o una rica torta curicana, que es uno de los pasteles típicos de la ciudad de Curicó. Su preparación consiste en hacer masas redondas de diversos tamaños, las cuales pueden tener variados rellenos como alcayota, manjar, almendras, entre otros.

Ñuble

Ahora es el turno de la Región de Ñuble, famosa por las longanizas de Chillán, las cuales son consideradas como un producto emblemático de la zona y de la región. ​ A tanto ha llegado su reconocimiento que al equipo de fútbol de la zona lo apodaron como La Longaniza eMcánica.

El uso de la longaniza en la comida chilena se encuentra extendido en platos de variados tipos, ya que es utilizada tanto como ingrediente para estofados y guisos, como también de acompañamiento en las legumbres, como es en el caso de los porotos con riendas o el popular plato de puré picante con merkén y longanizas.

Biobío

¡Te lo dijimos! Hay Chile para la buena mesa con gastronomía de norte a sur. Ahora seguimos avanzando hasta llegar a la Región del Biobío, la cual basa su gastronomía en productos del mar y carne de diversos animales. Un plato típico de la zona es el estofado de San Juan, que se hace con la carne algún tipo de ave junto con el cuero de chancho. Antiguamente esta preparación se cocinaba para celebrar la fiesta de San Juan, razón por la cual recibe su nombre.

Otro plato de la cocina criolla chilena que puedes probar en la zona del Biobío es la carbonada, que es un guiso que se cocina hasta que todos los leños del fogón quedan totalmente carbonizados. Se cree que el nombre de este plato proviene de las minas de carbón de Lota donde se preparaba este rico plato el cual puedes acompañar con una tortilla de rescoldo que se prepara con harina de trigo, manteca y sal y se cocina en el rescoldo de un fuego que normalmente se hace sobre arena fina.

Y para acompañar estas deliciosas comidas chilenas puedes tomarte un muday, que es una bebida alcohólica hecha de la fermentación de granos como el maíz, el trigo o el piñón, que es una semilla autóctona de la zona. El muday es una bebida tradicional del pueblo mapuche.

La Araucanía

Ahora nos encontramos en la Región de La Araucanía, donde la cocina criolla chilena, se funciona con los platos tradicionales de la comida alemana, suiza y española introducidas por los colonos.

Uno de los platos importante a destacar dentro de esta región es el locro de trigo, que es una cazuela de ave a la cual se le agregan papas, zanahorias, ají, condimentos y trigo partido el cual reemplaza al arroz. Esta preparación se puede comer acompañada de tortillas o sopaipillas.

Y si te gustan las pastas debes venir a la ciudad de Capitán Pastene, famosa por sus tradiciones y sobre todo por su rica comida con sabores italianos. Aquí podrás disfrutar de pastas hechas con recetas originales traspasadas de generación en generación por las familias italianas de la zona, como la pasta y la salsa boloñesa con hongos como digüeñes y los changles que se pueden utilizar en salsas y pebres.

Otra delicia heredada es el jamón prosciutto, que es un jamón de pierna crudo que debe permanecer colgado durante 18 meses para poder consumirlo y el jamón pierna trasera de cerdo que puede consumirse crudo, salado o ahumado en leña con ,una maduración de 12 a 30 meses bajo el aire frío de la cordillera de Nahuelbuta.

Como bebestible puedes probar la chicha de manzana a la usanza Mapuche,  un jugo de fruta fermentada de suave sabor. Pero si quieres probar algo aún más autentico de la zona, el muday es un imperdible, esta bebida producto de la  fermentación de granos de maíz y trigo es un clásico en los festejos del pueblo Mapuche.

Los Ríos

Seguimos avanzando hasta llegar a la Región de Los Ríos donde la comida chilena de esta zona nos entrega platos preparados con influencias españolas y mapuches-huilliches; además de preparaciones de estilo alemán que trajeron los colonos habitantes de la zona.

Algunos de los platos típicos de la zona son los asados al palo, chuletas de cerdo ahumadas de estilo kassler, el pastel de carne acompañado de papas asadas y el puré de manzanas y chucrut, entre otras.

Otro plato típico de la zona es el valdiviano, un caldo que se elabora con charqui y cebollas, creado por los soldados españoles en la época de la colonia.

También puedes probar el tradicional cancato de salmón que es un pescado relleno con láminas de longaniza y que a veces lleva con queso y tomate o el famoso pastel de jaiba. ¡Hay Chile para los amantes de la comida del sur de Chile!

Los Lagos

Ahora es el turno de la comida chilena de la Región de Los Lagos, donde la magia de la Isla Grande y calidez de su gente le da un sabor especial a cada platillo.

Porque hay chile para los amantes de la comida chilota, empezaremos por el aplaudido curanto chilote. Esta preparación mezcla carne, pollo, embutidos, mariscos y pescados, los cuales son tapados en capas de hojas de nalca, para posteriormente ser cocidos con la antigua técnica de cocción a base de piedras calientes enterradas en un hoyo.

Un platillo que en el archipiélago de Chiloé acompañan con un rico milcao, una masa de pan frito a base de papa rallada o un contundente chapalele, que mezcla ralladura de papa con harina de trigo.  Si eres de gustos más dulces, estas frituras parecidas a las sopaipillas también pueden acompañarse con miel de ulmo y licor de oro para coronar el festejo gastronómico.

Aysén

Seguimos avanzando hasta llegar a la Región de Aysén, donde la mayoría de sus platos son a base de carnes y pescados. Aquí podrás preparaciones con productos del litoral, de la pampa y de los bosques de la zona.

Los gastronomía esta zona están muy relacionados con las costumbres patagonas, chilotas y argentinas, las cuales han influido en la cocina aysenina. Las preparaciones más famosas son el asado de cordero, chivo o jabalí parado, que puede ir acompañado de unas ricas sopaipillas. Y el sabroso asado de cerdo al palo o cabrito acompañado de un pebre mapuche, el cual se prepara con tomate, ají, ajo, cebolla, perejil y cilantro y además sirve también como aliño para empanadas o diversas preparaciones de la cocina criolla chilena.

Hay Chile para los amantes de la comida aysenina, la cual se puede disfrutar acompañada de un rico mate.

Magallanes

Finalmente es el turno de la Región de Magallanes, donde podrás probar la centolla magallánica en Puerto Natales y disfrutarla como entrada, acompañada de con lechuga y verduras frescas, como chupe, en una sopa de caldo de pescado, con carne, pan y queso gratinado, en un ceviche o salteadas con aceite, ají cacho de cabra, sal, merkén, pimienta y orégano.

Y el guanaco magallánico que lo puedes comer como tártaro, como carpaccio mezclado con cebollines y aceite de oliva, con papas, en brochetas marinadas, o cocinado a las brasas con ensaladas. Ambos platos son típicos de la comida chilena de la zona.

Pero si lo tuyo son las experiencias más outdoor, entonces debes probar el cordero magallánico en un rico asado al aire libre, acompañado con sopaipillas y y un buen mate. Como toque final, prueba las sopaipillas calientes con un mermelada de calafate, una baya de color azul negruzco típica de la Patagonia, que te dejará chupándote los dedos. Incluso en el sur más al sur de nuestro país, hay Chile para los amantes de la comida.