Los mitos y leyendas de Chile han sido inspiración de incontables obras, con diversidad de relatos que cuentan los orígenes tanto de los áridos desiertos del norte como de los verdes bosques del sur.
Porque Chile es Tuyo, tu viaje empieza aquí, te dejamos algunos que echarán a volar tu imaginación. Son historias impactantes, que te permitirán empaparte de la cultura del país.
Ño Carnavalón, el muñeco del Altiplano
Característico del Altiplano, el Ño Carnavalón es un muñeco de trapo que representa la fertilidad y prosperidad en los cultivos.
Al muñeco se le desentierra una vez al año, en una ceremonia que da paso a un carnaval de música, bailes y juegos por las calles de San Miguel de Azapa en Arica antes de su posterior entierro.
Es tradición entregar ofrendas al Ño Carnavalón para pedirle favores, usualmente relacionados con la prosperidad de las familias y del pueblo.
Foto: Banco audiovisual de Sernatur
El origen de los Pachayatas
La historia de los pachayatas es conmovedora. Es una leyenda inca que habla de un príncipe y una princesa que se amaban profundamente, pese a que sus dos tribus estaban enemistadas. Aunque su amor era puro, fueron sacrificados para que nunca pudiesen estar juntos.
Luego de la muerte de los jóvenes, hubo lluvias y truenos catastróficos que hicieron desaparecer a las tribus. Así nacieron los lagos Chungará y Cotacotani, por donde navegaron los fantasmas de los príncipes, finalmente juntos. Y en sus tumbas aparecieron dos volcanes: El Parinacota y el Pomerame.
Los relatos de Chiu Chiu
Existe un sinfín de relatos en Chiu Chiu, poblado ubicado a orillas del Río Loa. Por ejemplo, está el Paso del Diablo, donde se rumorea que aparece el diablo a medianoche, bailando con un cuchillo y llevándose al infierno a quien lo vea.
Otro relato es el de la laguna Ojo de Mar, donde aparece una corriente de viento tan fuerte que arrastra a las profundidades quien esté cerca de ella.
Pero quizás la historia más importante gira en torno a la Laguna Inka Coya. Se dice que la hermosa princesa Colque Coillur se sumergió junto a su hijo luego de ser traicionada por su amado Atahualpa. De ahí el origen del nombre Inka Coya, que significa esposa del inca o nena del inca.
La ciudad fantasma: Tololo Pampa
En el Valle del Huasco, la leyenda cuenta que el pueblo de Tololo Pampa aparece para los viajeros perdidos, con luces, comida y bohemia para que tengan un descanso.
Hay quienes relatan incluso haber bailado y comprado regalos para sus seres queridos, para luego despertar tendidos en la arena y viendo que el pueblo ya no está.
Se cuenta que los habitantes de Tololo Pampa están penando luego de haber sido víctimas de un aluvión. También se cree que este lugar encantado es resguardado por Pata Larga, también conocido como el gigante minero, quien tiene enormes pies y que busca regalos para la princesa del pueblo.
La flor de Añañuca
Un hermoso y triste relato es el que rodea a la flor de Añañuca, según el cual una joven llamada Añañuca se enamoró de un minero que había llegado a Monte Rey (hoy Monte Patria) a buscar una veta de oro.
El hombre aseguró que un duende de la montaña le mostró la ubicación de la veta de oro en un sueño, por lo cual salió a buscarla. Aunque le prometió a Añañuca que regresaría, el hombre nunca volvió.
La tristeza se apoderó de la doncella, quien murió de amor y fue enterrada en un día de inusual lluvia, tras el cual florecieron hermosas flores rojas que en honor a la joven fueron bautizadas como añañucas.
Foto: @ruta.alasestrellas
Cueva de la Quintrala
En la Región de Coquimbo, uno de los atractivos turísticos de la playa de Pichidangui es la Cueva de la Quintrala, ubicada en el sector de Punta Quelén, con cerca de 100 metros de longitud y salida al mar.
El origen del nombre de la cueva se remonta a la Colonia, cuando el terreno pertenecía a la Hacienda de Longotoma, encabezada por doña Catalina de Los Ríos y Lisperguer, más conocida como la Quintrala.
Distintas leyendas y relatos rodean a la Quintrala, quien se cuenta que maltrataba a sus peones y que tenía tratos con el diablo. La historia cuenta que esta mujer tuvo numerosos enamorados que luego llevaba a la cueva para torturarlos y lanzarlos al mar.
La Laguna del Inca
A pocos kilómetros de Santiago se ubica el centro de ski Portillo, donde se enceuntra una laguna color esmeralda conocida como la Laguna del Inca.
La leyenda narra que el inca Illi Yupanqui se enamoró profundamente de la princesa Kora-Ilé, amor que se selló en un matrimonio en una de las cumbres que rodean la laguna. Durante el descenso, la novia resbaló por la ladera del cerro y cayó al vacío.
Luego de encontrar a su amada fallecida, Illi Yupanqui decidió que ninguna tumba estaría a la altura de Kora-Ilé y ordenó depositar su cuerpo en el centro de la laguna. A medida que el cadáver se hundía, la laguna adoptó el color de los ojos de la princesa y se tornó esmeralda.
Hasta el día de hoy se cree que la laguna está encantada y que el alma de Illi Yupanqui sigue llorando la ausencia de su amor.
Los túneles secretos de Santiago
¿Conoces los rumores en torno a un laberinto de túneles bajo Santiago? Se cuenta que fueron construidos bajo la colonia y que servían para todo, desde el transporte de tesoros y suministros militares hasta la fuga de monjes y monjas en amores prohibidos.
También existen muchos mitos en torno al Metro de Santiago, donde varias estaciones han sido escenario de apariciones fantasmales. La que más relatos concentra es la estación Baquedano, donde trabajadores y pasajeros han reportado ver figuras borrosas y oír voces en la noche.
El chon-chón, quil-quil o tué-tué
El pájaro de la muerte. El chonchón, Chon-chon, Quilquil, Totué o Tué-tué es una criatura perteneciente a la mitología mapuche y que es muy conocida en el campo de la zona-centro sur, especialmente en comunas como Coltauco, Machalí y Pelequén.
El mito habla de una extraña ave de color gris, con garras afiladas y una cabeza humana cuyas orejas utiliza como alas. Escuchar su fatídico grito es una sentencia: si oyes el “tué-tué”, signfica que la muerte acecha.
Doñihue: El Diablo entre el chamanto y el chacolí
Doñihue es la cuna de las chamanteras y la capital del vino chacolí. Además, en sus tierras se ha contado múltiples relatos populares, entre ellos la historia de cuando el diablo se aburre.
El relato dice así: el diablo había ido a Rancagua para ajustar cuentas con un cristiano por un pacto. Pero, aburrido de provocar suplicios y martirio, terminó yéndose de fiesta con los mineros recién pagados.
Las salidas se volvieron habituales y empezaron a haber cada vez más invitados. Hasta que en un evento, un anciano festejó la forma de bailar del diablo exclamando: ¡Virgen Santísima, que bien baila este roto! El solo nombre de la Santa Patrona bastó para que el cola de flecha desapareciera en una explosión.
Se dice que el diablo sigue apareciendo por Rancagua buscando almas para llevar al infierno, pero nunca en el día de pago de los mineros. Y que para espantarlo, basta con decir: ¡Por la Virgen Santísima, arranca que viene el viejo curao!”.
La Novia del Periplén
Nos movemos hasta la costa del Maule. Hace mucho tiempo en Pelluhue, dos jóvenes de Canelillo y de Cardonal se enamoraron profundamente, pero madre de la muchacha se oponía tenazmente a la unión. Cuando su hija se fue a casarse, le lanzó una maldición: “Con tu porfía te irás pero te juro, que jamás volverás”.
La pareja se casó en Curanipe y celebró una gran fiesta, con una paila marina y botellas de vino. Pero en su camino de regreso, el Río Chovellén aumentó abruptamente su caudal y los recién casados se hundieron justo a la roca de Periplén.
En Pelluhue dicen que la hermosa novia reaparece durante los crepúsculos veraniegos. Se le puede ver sentada en la roca de Periplén, esperando que las sombras cubran el paisaje antes de volver a las aguas.
Los relatos de Isla Mocha
En la Región del Biobío, frente a la costa de Tirúa se emplaza la Isla Mocha, lugar que encanta a los amantes de la fotografía por sus hermosas postales y su flora y fauna nativa.
Acá se da un fenómeno que ocurre en muy pocos lugares del planeta. En algunos lugares del mar se puede prender fuego debido a las altas concentraciones naturales de gas metano, formándose una escena única que ha inspirado distintas leyendas.
La isla constituye un sitio sagrado para la religión mapuche, destacando la tradición de los trempulcahue, cuatro ballenas encargadas de llevar las almas de los muertos hasta el Ngill chenmaywe.
Acá también vivió el cachalote Mocha Dick, que motivó un relato del explorador Jeremiah N. Reynolds, que a su vez fue fuente de inspiración para la reconocida obra literaria de Herman Melville, Moby Dick.
Las serpientes Treng Treng y Kai Kai Vilu
Reconocida es la leyenda mapuche de la gran lucha entre Kai Kai y Treng Treng Vilu, las serpientes de agua y de la tierra.
Según el relato, Kai Kai ordenó a las aguas invadir la tierra, ante lo cual Treng Treng llamó a los hombres huir hacia los cerros para salvar sus vidas. Así comenzó una lucha donde la cordillera se elevaba cada vez más.
Quienes no escaparon se transformaron en peces y lobos tras ser alcanzados por el agua. Finalmente, Treng Treng pidió a los hombres que realizaran un sacrificio para calmar la furia de Kai Kai, con lo cual descendieron las aguas y los mapuche volvieron a poblar la tierra.
Pillán: espíritus volcánicos
Según el pueblo mapuche, se cree que en cada volcán existen espíritus de gran poder llamados Pillán, que están bajo la tutela de los espíritus superiores llamados Ngen. Uno de los relatos conocidos de estos espíritus es el de la guerra entre Rucapillán y el Quetrupillán.
El enfrentamiento terminó cuando Rucapillán tomó desprevenido a Quetrupillán, quien confiado creía que había ganado la batalla. De un solo soplido arrasó con su cabeza, dejándolo sin cráter y sin la cresta que lo coronaba.
El Quetrupillán es conocido como el volcán “Mocho” por la forma de su cono mutilado, permaneciendo inactivo por la vergüenza de la derrota. En contraste, el Rucapillán es ahora conocido por todos como Volcán Villarrica, el más destacado y hermoso de la zona.
La Cueva de Quicaví
Reconocidas e incontables son los mitos y leyendas de la Isla de Chiloé. Seguro has oído hablar del Trauco, la Pincoya y el Caleuche, cuyas historias puedes revisar en el siguiente artículo.
En esta ocasión queremos trasladarnos hasta la comuna de Quemchi, específicamente hasta la localidad de Quicaví. Allí se encuentra una cueva también conocida como Casa Grande, donde las narraciones ubican al Supremo de los Brujos.
La cueva está resguardada por el Invunche, criatura deformada que tiene una pierna pegada al cuello y que perdió la facultad de hablar, por lo que solo se comunica con ruidos o gruñidos.
Los relatos cuentan que dentro de la cueva hay distintos objetos de brujería. Entre ellos el Macuñg, chaleco luminoso que permite volar a los brujos y que está confeccionado de piel humana.
El dedo del indio Patagón
Foto: Banco audiovisual de Sernatur
De las estatuas más conocidas de Punta Arenas. Ubicada en la Plaza de Armas, se dice que besar su dedo gordo entrega protección y suerte en cada viaje.
¿El origen de la leyenda? Cuentan que un marino español se fascinó tanto con la estatua del indio, que se la tatuó en el pecho.
Frente al espejo, el marino le preguntó a su tatuaje si sus aventuras serían exitosas, viendo para su sorpresa como el dedo gordo del pie del indio se movió afirmativamente. De esta manera emprendió un viaje, del cual regresó con éxito y sano y salvo, por lo que le contó a todos lo que le había sucedido.