Hace uno par de meses el mundo se detuvo, pusimos en pausa nuestros planes, rutinas diarias y hasta itinerarios de viaje. Algunos más tristes que otros, tuvieron que dejar atrás las vacaciones de sus sueños, meter las maletas otra vez al closet y posponer pasajes. Muchos aprovechamos el tiempo para viajar de manera online y buscar nuevos destinos para descubrir cuando todo vuelve a la normalidad o, por lo menos, cuando digamos adiós al 2020.

Pero ¿ustedes también lo notaron? ¿miraron con asombro a su alrededor? Y es que durante esta pausa nos permitimos observar con otros ojos nuestros atractivos, darnos cuenta de lo que teníamos cerca y apreciarlo. Mejor aún, ver como la naturaleza volvía a florecer sin freno y los animales sentirse más libres.

En este proceso sin precedentes hemos redescubierto nuestras ciudades, nuestros pueblos y a nuestra gente. Salimos a caminar por el barrio y nos encontramos con maravillas culinarias que estaban a la vuelta de la esquina. El parque por el que todos los días pasábamos para ir al trabajo se convirtió en un nuevo monumento natural para nuestros ojos y esa pileta casi invisible en una verdadera cascada.

Además de un redescubrimiento al exterior de nuestras casas, también tuvimos uno al interior muy importante. Más tiempo con nuestras familias, nuevas maneras de conectarnos con nuestro interior y fortalecer esos lazos que en la vida cotidiana se disuelven en los quehaceres. Nos dimos cuenta que los problemas del día a día no eran tan graves, nos reencontramos con viejos amigos y hasta con nosotros mismos.

¡Festejamos salir salimos a respirar ese aire libre que tanto necesitábamos! Nos sorprendimos con esos destinos maravilloso, de categoría mundial, que no habíamos visitado antes y que están tan cerca de nosotros, muchos de ellos dentro de nuestras propias ciudades o máximo 1 hora de viaje.

¿Calles llenas de fiestas o una alejada y tranquila playa? Antes del 2020 quizás muchos hubieran preferido la primera opción, pero hoy nos hemos enamorado de esos lejanos e imponentes paisajes que dejan sin palabras, esos silencios absorbentes de nuestra naturaleza, y que en Chile tenemos por miles.

Los viajeros y viajeras de nuestro país han descubierto poco a poco nuevos rincones donde llevar su pasión por el viaje. Playas escondidas, bosques no tan populares, parques y reservas donde hacer trekking hasta de un cerro para inmortalizar el momento, y guardar como nuevo regalo esa fotografía del instante,  o simplemente calles nuevas por donde caminar, dentro de sus regiones.

Un 2020 para apreciar lo auténtico

 

Sin duda la pandemia nos enseñó muchísimo. Cambió nuestra forma de mirar, pero también nuestra forma de vivir en comunidad. Desde este año hemos estado más atentos a nuestros vecinos, de nuestros compañeros y amigos. Esto mismo nos lleva a cuidar del otro y ayudar en todo sentido.

Las compras a pequeños emprendimientos y negocios familiares son ahora más frecuentes y no solo eso, también son mucho más apreciadas. Preferir productos locales, ya sea para ti o para regalar, significa un producto auténtico y de mayor calidad muchas veces, además de ayudar a preservar tradiciones que dan autenticidad a una comunidad. 

Es por eso que, al visitar un nuevo destino o poblado cerca de casa, te recomendamos preferir siempre los productos y servicios locales, ayudando así a la economía del lugar, a las familias o artesanos que hay detrás de estos emprendimientos e impulsando el destino visitado. ¡Y todos ganamos!

A la hora de elegir bocadillos o snack para nuestros viajes también puedes optar por la cocina local y preferir un producto más fresco y de origen en la zona. Esta opción no solo ayuda al comercio local, si no que estás reduciendo tus residuos en la zona, evitando llevar envases plásticos o envoltorios. ¡Recuerda que Chile erradicó hace años la utilización de bolsas plásticas en sus comercios!

Cuidémonos nosotros y al medio ambiente

Hemos tenido mucho que pensar durante el tiempo de cuarentena y el medio ambiente no se queda atrás. ¿Se dieron cuenta de las especies que aparecieron? Y no, no son nuevas especies. Es nuestra fauna recobrando su hábitat, apoderándose del territorio que por mucho tiempo tuvo que dejar por su incompatibilidad con la civilización.

Pumas, zorros, elefantes marinos y hasta ranas. Es la gran noticia de este año. Luego de 80 años de desaparecida, la Rana de Hall apareció en Chile en medio de una expedición a Aguas Calientes, cerca de la localidad norteña de Ollagüe, lugar donde afloran aguas termales que rondan los 28 grados centígrados.

En Puerto Cisne se vivió algo tan sorprendente como esto, encontrando a un elefante marino caminando por las calles de la ciudad. Esta especie es muy común en Chile, pero lo que no es común, es verlo paseando por las calles. Esto se debe a la poca movilización durante la cuarentena. Y que decir de los avistamientos de pumas y cóndores en Santiago ¡se querían tomar de regreso la ciudad!

 

¡La naturaleza ha hablado!

 

Es momento de tomar conciencia y escuchar lo que la naturaleza nos dice. Si es posible que los animales aparezcan tan rápidamente gracias a nuestro cambio de hábitos, podemos aportar mucho más. Antes de viajar y visitar nuevos destinos preocúpate de practicar un turismo responsable y sostenible ¡Es muy fácil! Tomando las decisiones correctas podrás lograrlo.

Para realizar un viaje más consciente con el medio ambiente debes preferir alojamientos que funcionen de forma sustentable ¿cómo? Puedes guiarte por el buscado de servicios turísticos de Sernatur: https://serviciosturisticos.sernatur.cl/

Recuerda también reducir al máximo tus residuos, prefiere envases reutilizables. No hagas fogatas, camina siempre por senderos autorizados y jamás alteres el hábitat de una especie ni la saques de él, aunque sea solo para una foto. Con estos consejos ya estamos listos para recibir un nuevo año.

 

¡Bienvenido 2021!

Ya aprendimos lo necesario este año y estamos listos para recibir uno nuevo donde podamos poner en práctica nuestra nueva forma de vida, más tranquila, más calmada, en familia y con mucha más conciencia.

Enseñemos todo esto a las nuevas generaciones para que juntos hagamos del mundo un mejor lugar para nosotros y para cada una de las especies que nos acompañan. Tomemos cada detalle, cada experiencia y aprendizaje de este año y llevémoslo al 2021 y juntos sigamos avanzando.

¡Felices fiestas!